¿Adoraría usted a un Dios que envía su propia familia al infierno?
“Deberíamos tener como meta suprema en la vida, llegar al cielo con nuestra familia” – Javier Donate, pastor, escritor y conferencista internacional
Decir que el infierno no debería existir porque no queremos que ningún familiar estuviera allí es como decir que las cárceles no deberían existir porque tampoco quisiéramos que nuestra familia estuviera allí. Si creemos en la justicia entonces las cárceles deben existir para las personas (aunque sean seres queridos) que cometen crímenes y desobedecen las leyes civiles. De esa misma manera y por esa misma razón es que existe un Infierno para castigar a aquellos que desobedecen la Ley de Dios. De hecho, las mismas cárceles son prueba de que creemos en una moral objetiva lo cual es un argumento a favor de la existencia de Dios pues sn Dios todo sería relativo.
¿Pero por qué un castigo eterno? Porque se peca contra un Dios santo, justo y eterno. Además dicho argumento ateo trata de poner el sentimentalismo por encima de la justicia apelando así a una falacia por emoción (conocido también como argumentum ad passiones) la cual trata de manipular las emociones del oponente o del público, en lugar de usar argumentos válidos. Este tipo de falacia es más evidente en personas que dejan que sus emociones o consideraciones subjetivas influyan en el proceso de razonamiento.
Después de todo, es contradictorio que un ateo diga que Dios no existe, pero es malo. Pero no solo eso, ¿según qué estándar Dios es malo si en un mundo sin Dios no hay tal cosa como malo ni bueno? No hay ética sin metafísica y esto lo han admitido filósofos ateos y agnósticos como Nietzsche, Sartre, Camus, y muchos otros. En palabras del filósofo ruso, Fiódor Dostoyevski, “Sin Dios todo está permitido.” El ateo simplemente no tiene base o fundamento para la moral por lo que trata de tomar prestado (o robado) la moral del cristiano para juzgar de manera objetiva a Dios lo cual es inconsistente con su propia postura.
El argumento ateo tampoco tiene sentido y suena deshonesto pues si en realidad amaran a sus seres queridos y amistades entonces se convertirían, orarían y les predicarían para que no terminen en dicho lugar de tormento. De esa manera tendrián más probabilidades de arrepentirse de sus pecados y recibir a Jesucristo como su Salvador personal (Vea Hechos 16:31-33; Romanos 10:13-17; 1 Corintios 7:14-16 ; Deuteronomio 6:-7 y Lucas 16:19-31). La Biblia no promete la salvación para el hogar. Pero eso no significa que el cristiano no tenga una profunda influencia espiritual en el resto de su familia. El líder del hogar por ejemplo establece el curso para la familia en muchos aspectos, incluso espiritualmente.
Siguiendo con la misma ilustración y analogía de las prisiones, el que realmente quiere a su hijo y le desea el bien le da buenos consejos y le exhorta a obedecer las leyes civiles para que no termine en malos caminos porque sabemos que habrá serias consecuencias como la cadena perpetua o pena de muerte. Lo mismo con los juicios de Dios. No podemos obligar a nadie pues todos tenemos libre albedrio, pero con nuestras oraciones, evangelismo personal y testimonio o ejemplo podemos ganarlos para Cristo. Sin embargo, hay ateos como el youtuber Aronra que dicen que aun si Cristo fuera la verdad no lo aceptarían. Esto es puro narcisismo y egoísmo extremo ya que todos tenemos familia. ¿Acaso prefieren que su familia vayan al infierno solo porque no les agrada Jesús? ¿Es eso amor? No. Al contrario, amor es hacer aquello que no te gusta para beneficio de otros. Por ejemplo, a muchos cristianos no les gusta debatir con ateos o progres debido a la censura, las mentiras y los insultos que reciben. A nadie le gusta eso. Pero lo hacen por la audiencia a quienes se les ha engañado o adoctrinado a traves del posmodernismo o ateísmo militante de Internet. En otras palabras, no solo nos preocupa nuestros familiares y amistades sino también la gente perdida del mundo que no conocemos. Eso es verdadero amor.
Por tanto, aunque en el cielo no habrá más tristeza porque “Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.” (Apocalipsis 21:4) aquí en la tierra nos sentimos tristes cuando nuestros familiares inconversos no quieren aceptar a Cristo en sus vidas porque sabemos que eso les costará su salvación eterna. Así como los padres sufren y se lamentan cuando sus hijos acaban en la cárcel por tomar malas decisiones en la vida también nos pone triste cuando tampoco quieren alcanzar salvación a través de Cristo sabiendo que también habrá consecuencias futuras. Pero con negar la existencia de Dios y el infierno simplemente no van a salvarte asímismo ni a su familia lo cual demuestra a su vez que el ateo en realidad tiene falta de amor y poco interés en salvar su propio pellejo y la de su familia. Solo busca excusas baratas para tratar de justificar su rechazo a Dios porque ama más su pecado que su propia alma.
En fin, “Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.” (Hechos 16:31)
Desde luego, luchar contra hombres de paja es lo más fácil del mundo como demuestra este artículo.
Yo soy ateo, no creo que exista ningún Dios hasta que alguien lo demuestre racionalmente, con evidencias incontestables, hasta entonces los dioses son tan reales como las hadas, cuya existencia también está pendiente de demostración.
Entonces es ridículo que alguien pretenda que un ateo pueda decir que Dios que no existe, es bueno o es malo, si no existe no puede ser nada, como las hadas no pueden ser traviesas.
Pero sí que es posible juzgar el carácter o las acciones de un personaje de FICCIÓN ¿Cierto?
Yo puedo decir que el Pingüino de Batman es un malvado o que el Dios Loki era perverso o la Diosa Freya amable y cariñosa, eso puedo decirlo sin faltar a la lógica ¿OK?
Por tanto, puedo juzgar al Dios cristiano según lo que su mitología cuenta de Él, la Biblia en resumen. Y por lo que la Biblia Cuenta de su Dios, es imposible deducir otra cosa fuera de que es un monstruo sádico, un tirano de la antigüedad con esteroides. Genocidios, exterminios, racismo, homofobia, infanticidios, asesinatos, llamados a la violación en masa, torturas eternas… ¿De qué otra manera se puede juzgar a un Dios que hace semejantes cosas?
Choca que los adoradores de semejante Dios, que los que consideran infinitamente bueno a semejante Dios, hablen de ética, sorprende mucho.
Otro punto, el paralelismo entre la cárcel y el infierno es falso. Primeramente porque la cárcel no es eterna, en el peor de los casos termina con la muerte del preso. En segundo lugar, porque en las sociedades civilizadas, en las cárceles no se tortura. Y en tercer lugar pero lo más importante de todo, porque en las sociedades civilizadas con la cárcel lo que se pretende por encima de todo es la reinserción del reo en la sociedad, corregir sus malas inclinaciones, mejorar al reo (se logre o no, eso se pretende)… ¿Qué corrección o reinserción o mejora del reo caben en un castigo eterno? Eso no es castigo, es venganza cruel y desproporcionada.
Pero hay más, yo me pregunto, si existiera el cielo y el infierno como dicen que es los cristianismos, aclárenme como una madre podría ser feliz en el cielo sabiendo que su hijo es torturado eternamente en el infierno.
jasimoto