¿Cuál es el problema de comparar a Dios con Santa Claus?

     1. Decir que creer en Dios es como creer en Santa Claus es apelar a una falsa analogía ya que uno es una figura teológica y filosófica y el otro un personaje ficticio. Sin olvidar que el Dios de la Biblia es definido como ser inmaterial (espíritu) y Creador del universo mientras que Santa Claus es descrito como una criatura física (viejito barrigudo de traje rojo y barba blanca) lo que hace evidente que la comparación es una falacia de categoría.

  1. Los niños dejan de creer en Santa Claus cuando crecen pero no dejan de creer en Dios. Esto se debe a que hay varios argumentos a favor de la existencia de Dios (como el argumento cosmológico del Kalam, ontológico, teleológico, contingencia, la información biológica del ADN, ajuste fino, la moral, etc.) y una abrumadora evidencia histórica sobre la existencia de Jesús. En cambio, no hay argumentos y evidencias para creer que Santa Claus o el ateísmo es verdadero. Además de que ya está comprobado que los niños empiezan a creer naturalmente en un Creador sobrenatural a medida que crecen. Aun si sus padres fueran ateos y nunca les hablara de religión.  En cambio, para que un niño crea en Santa Claus (o el ateísmo) hay que engañarles contandoles el cuento (adoctrinarlos).

http://www.telegraph.co.uk/news/religion/3512686/Children-are-born-believers-in-God-academic-claims.html

http://creation.com/children-see-the-world-as-designed

http://www.smh.com.au/national/infants-have-natural-belief-in-god-20080725-3l3b.html

http://www.autismepicenter.com/autism-blog/blog2.php/2010/06/28/is-your-autistic-child-going-to-heaven

  1. Muchos ateos militantes hablan tanto del Viejito Pascuero que a veces dan a entender que durante su niñez tomaron esta fantasía tan en serio (quizás hasta le dejaban leche y galletitas) que no han podido superar la mentira que le jugaron sus padres al descubrir la verdad de que no hay tal cosa como un Santa Claus. Es como si dicho resentimiento o experiencia traumática los llevó a la mala conclusión de que si no hay Santa entonces tampoco debe de haber un Dios.

      Este tipo de síndrome de Santa Claus muestra que no saben de filosofía y teología pues el que hayan descubierto que el Duende de Navidad no era real NO significa que Dios tampoco lo sea. Sin olvidar que Dios y los cristianos que no creen en Santa no tienen la culpa de que los atheus hayan puesto su fe en el dios equivocado.

http://www.conservapedia.com/Santa_syndrome

https://www.youtube.com/playlist?list=PL3F54DB0328E314F9

          4. No hay evidencias en contra de la existencia de Dios cosa que han admitido los mismos ateos y agnósticos como Richard Dawkins, Carl Sagan y Bertrand Russell. En cambio, se puede probar fácilmente la inexistencia de Santa Claus lo que demuestra que el mito de los ateos militantes de que no se puede probar un negativo es falso. Por ejemplo:

a. Nadie vive en el Polo Norte

b. Los juguetes de los niños no vienen con etiquetas diciendo “Hecho en el Polo Norte por elfos o duendes” sino que dicen “Hecho en China” o en algún otro país.

c. Todo es cuestión de quedarse despiertos durante la noche hasta descubrir que son los padres los que dejan los regalos del árbol de Navidad. Algunos padres hasta guardan las cartas de sus hijos como prueba y admisión de que estaban dándole crédito a un ser que no existe por los presentes.

d. Para que Santa Claus pueda controlar el tiempo (repartir millones de regalos alrededor del mundo en una sola noche), los animales (venados voladores) y la materia (cargar una enorme cantidad de regalos en una sola bolsa) tendría que ser Dios. El problema es que no se le considera Dios, ni tiene los atributos para serlo.

https://www.youtube.com/watch?v=XM8F6RwSZrs

https://www.youtube.com/watch?v=vgW0ZbnA6Tk

https://www.youtube.com/watch?v=sQQxGfQ9CEQ

En conclusión, mientras los ateos militantes apelan a la fantasía (Santa Claus, unicornios, dragones, duendes, etc) contra la existencia de Dios, nosotros los creyentes usamos argumentos filosóficos, la historia, las matemáticas, la ciencia, la antropología, la sociología y la arqueología entre muchas otras para defender nuestra fe cristiana, saludos.