¿Sabían Adán y Eva lo que era el libre albedrio antes de pecar?
¿Qué es libre albedrio? Es cuando Dios te da un mandamiento (como no comer del árbol prohibido), permite que tú elijas en obedecer o no obedecer y te hace responsable de tus propias decisiones. ¿Sabía esto Adán y Eva? Definitivamente, cuando Adán fue colocado en el jardín de Edén, se le dijo que él podía comer de todo árbol excepto del árbol del conocimiento del bien y del mal. Cuando Eva fue creada, ella fue también advertida, aunque la Biblia no indica si esta advertencia fue dada por Dios o por Adán (quien la recibió directamente de Dios). No debían comer de él; en caso de que desobedecieran, en aquel día morirían (Génesis 2:16, 17). Ella lo conocía tan bien que fue capaz de repetirlo casi palabra por palabra (Génesis 3:1-3). Se lo repitió a una serpiente Vea Génesis 2:17 y Génesis 3:1-4.
Sin duda Eva había visto antes miles de veces al árbol, pero ahora parecía tan atractivo. Eva comenzó a mirar el árbol prohibido con otros ojos. “El árbol era bueno para alimento, y […] a los ojos era algo que anhelar.” Lamentablemente, a pesar de tener a su disposición todos los demás árboles, Eva decidió seguir pensando en lo que el Diablo le dijo acerca del árbol que estaba en medio del jardín. ¿Con qué resultado? “Empezó a tomar de su fruto y a comerlo.” Satanás había sembrado en ella un deseo por algo que el Creador había prohibido.Totalmente engañada, desobedeció la ley de Dios (Génesis 3:1-6; 1 Timoteo 2:14).
¿Era inevitable el pecado de Eva? De ninguna manera. Adán y Eva no eran bebés irracionales, tenían una mente perfecta. Pongámonos en su lugar. La alegación de la serpiente distorsionaba por completo lo que tanto Dios como Adán habían dicho. ¿Cómo nos sentiríamos si a un ser amado en quien confiamos, un desconocido lo acusara de habernos mentido? La reacción de Eva debería haber sido diferente: hubiera debido indignarse o incluso negarse a seguir escuchando. Al fin y al cabo, ¿quién era la serpiente para cuestionar la justicia de Dios y la palabra de su esposo? Por respeto al principio de jefatura, Eva debería haber consultado con Adán antes de tomar cualquier decisión. Nosotros tendríamos que responder de una manera similar si nos encontráramos con información contraria a las instrucciones divinas. Sin embargo, Eva confió en las palabras del Tentador y deseó ser su propio juez en cuanto a lo que era bueno y lo que era malo. Cuantas más vueltas le daba a la idea, más atractiva le parecía.
Satanás capturó el interés de Eva, quizás pudo codiciar qué poderes le daría el árbol si a una serpiente le dió la habilidad de hablar, pues ella sabía que las serpientes no hablan. No olvidemos que su esposo estudió a los animales —incluida la serpiente— y les puso nombre a todos, así que es muy probable que ella también conociera bien a este reptil (Génesis 2:19). Eva quería ser como Dios! Sin duda, fue un grave error albergar un deseo incorrecto en lugar de descartarlo de su mente o hablar de ello con el cabeza de la familia (1 Corintios 11:3;Santiago 1:14, 15). Algunos ateos dirán: “¿Pero no se contradice la Biblia cuando Dios le dice a Adán y Eva que no coman del fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal? Si ésta era la única forma en que podían llegar a distinguir la diferencia entre el bien y el mal, ¿cómo iban a saber que era incorrecto desobedecer a Dios y comer la fruta?” Adán y Eva lo que necesitaban, más allá de saber, era conocer que Dios les prohibió comer del árbol. Debieron conocer su voluntad. Lo que necesitaban hacer era obedecer. No necesitaban “conocer” el mal para “saber” que estaba mal (Romanos 16:19). En otras palabras, conocer es mucho más profundo que simplemente “saber” cuando conoces, lo sabes pero también lo experimentas. Usas tus facultades de aprendizaje. Lo haces tuyo. Dios dijo “no coman”. Sabían que no debían desobedecerle, pero no fue hasta que desobedecieron que conocieron el mal. Dios por ejemplo sabe lo que es el pecado (sabe del mal) pero no lo conoce (no hace el mal). He ahí la diferencia.
http://verdadyfe.com/2015/07/13/preguntas-problema-logico-en-genesis/