¿Dónde y qué hacía Dios antes de crear el mundo?

¿Dónde y qué hacía Dios antes de crear el universo pues no se puede existir sin el tiempo?

“La cruz de Cristo no fue el plan B que Dios tuvo que introducir cuando los judíos decidieron rechazar a su Mesías. Ese siempre fue el plan A, el único plan posible para redimir y perdonar a pecadores culpables sin pasar por alto la justicia de Dios.” – Sugel Michelén

El argumento naturalista es una vieja falacia similar al que hacia el filósofo mediocre, Sebastián Faure, cuando preguntaba ¿dónde estaba la materia antes de que Dios creara el universo? El gran filósofo cristiano Agustín de Hipona tenía dos respuestas a esta pregunta: una graciosa y la otra en serio. La primera era que sarcásticamente decía, que Dios estaba preparando el infierno para las personas que hacían este tipo de preguntas y la respuesta seria era que estaba en la eternidad pues no existía el tiempo antes de la creación del mundo y que por ende la pregunta no tiene sentido. El tiempo es una entidad creada pues Dios creó el tiempo, espacio y materia al mismo tiempo y en el día primero de la semana de la creación pues ninguno de estos puede existir sin los otros (Génesis 1:1).

“En el principio…” es cuando el tiempo empezó (Génesis 1:1). Así que, si alguien pregunta qué hizo Dios con todo ese tiempo antes de la creación lo mejor es responderles ¿a qué “tiempo” se refiere? Pues no había tiempo antes de la creación del universo. Dios es un ser atemporal por lo que antes de que el tiempo empezara solo había eternidad (Salmo 90:2 y Apocalipsis 1:8).

Sin embargo, la Biblia muestra que Dios no estaba inactivo antes de la creación del mundo. En primer lugar, Dios nunca ha estado solo pues antes de la creación siempre ha existido en tres Personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Segundo, la Trinidad existía desde la eternidad en perfecta armonía, comunión, gozo, plenitud, satisfacción, santidad y teniendo todo lo que necesitaban los unos en los otros (Salmo 16:11). Por tanto, antes de la creación había comunicación, planificación y amor entre los miembros de la Trinidad (Vea Efesios 1:4-5; 2 Timoteo 1:9; Juan 17:24 y Tito 1:2). Todo lo demás queda en misterio pues todo lo que necesitamos saber sobre Dios es qué Él ha hecho y qué planea hacer en el futuro (Deuteronomio 29:29).

Sin embargo, el ateo afirma que Dios debe y requiere del tiempo para crear y existir. Las palabras claves son “debe” y “requiere” puesto que muestran que el ateo apela a una falacia de hombre de paja y de petición de principio al poner límites al Dios cristiano al asumir que no puede actuar en la eternidad si no está sujeto por las leyes físicas que El mismo creó. En otras palabras, dicho razonamiento ateísta es circular ya que apela al naturalismo, es decir, lo que existe solo puede funcionar de acuerdo a las leyes de la naturalza.

Esto es falaz puesto que Dios crea en la eternidad donde no hay tiempo (Apocalipsis 1:8; Génesis 1:1) y la razón por la cual Dios es eterno es porque está fuera del tiempo y por ende la ley de causa y efecto no aplica a su existencia. Además, decir que Dios necesita tiempo para crear el universo (lo cual tambien incluye el mismo tiempo ya que es parte del universo) suena contradictorio a menos que el ateo crea que el tiempo es eterno lo cual es científica y lógicamente imposible. En otras palabras, asumir que el tiempo existía antes de su propia creación o antes de Dios haberlo creado es una contradicción lógica porque el tiempo es parte del universo y científicamente no es infinito y por ende su causa tuvo que ser la Primera Causa Incausada y estar fuera del tiempo puesto que es su Creador.

En cuanto a la otra pregunta de cómo este trino Dios podía estar activo si para hacer tales cosas se necesita tiempo, se debe recordar que Dios es eterno por lo que no está limitado por las leyes físicas como el tiempo, espacio y materia que Él mismo creó (Génesis 1:1-2; Juan 1:1-3 y 2 Pedro 2:8). Asumir tal cosa sería cometer una falacia de hombre de paja pues Dios no es igual a nosotros, ni está sujeto al tiempo, ni está confinado en el tiempo que Él mismo creó y controla. Un ser físico, que por serlo, necesita una superficie donde ponerse de pie; que necesita tiempo para desarrollar sus actividades y materiales (físicos) con qué trabajar en cualquier proyecto que se disponga a llevar a cabo. Por definición (me refiero al concepto bíblico del Creador), Dios no es físico sino espiritual – por lo tanto tampoco necesita ni espacio ni materia para existir.

Un buen ejercicio mental es imaginar el universo como una caja con paredes. Dios está fuera de esas paredes y las leyes con que se rige el universo dentro de la caja no aplican a donde está Él. Nuestros telescopios nunca podrán alcanzar a ver lo que está en los límites del universo, mucho menos lo que está afuera de las “paredes”, por las asombrosas distancias y otras limitantes que la ciencia reconoce. ¿Cuáles son las condiciones afuera de la “caja”? ¿Qué leyes rigen? No sabemos. Pero si Dios creó toda esta perfección para nosotros en esta caja, la Biblia dice que luego creará otra “caja” o “un cielo nuevo y una tierra nueva” que serán mucho mejores que la actual (Apocalipsis 21:1-4 y Isaías 66.1-2).

En fin, dicha pregunta asume un razonamiento circular naturalista y una falacia de hombre de paja que intenta mal representar el argumento cosmológico del Kalam y ponerle limites al Dios de la Biblia. Dios simplemente no está confinado en el tiempo y tampoco necesita del tiempo porque no está sujeto a las leyes físicas que Él mismo creó sino que fuera del tiempo. Es por eso que Dios es sobrenatural, no natural, saludos.